—Pero… ¿Para qué quiero yo saber quién NO es mi cliente ideal? – me preguntó superextrañado.
—Para esto 👇 – le contesté -.
Para filtrar mejor a tu #clienteideal.
Porque a veces se nos cuelan algunos que parece que sí, pero no.
Te lo explico con un hecho real.
Como a mí me gusta mucho viajar en todo tipo de vehículos, siempre digo que sí a todo:
—María, ¿qué tal si alquilamos una moto y nos vamos de ruta por Chiang Mai (Tailandia)? – y allá que me fui, muerta de miedo – porque conducen de terror – pero, sobreviví-.
—¿Qué tal si cruzamos la frontera entre Camboya y Tailandia en el tren regional? – y disfruté como una niña, allí con todos los locales, sus gallinas… –
—¿Y si cruzamos Australia de norte a sur en caravana? – y nos hicimos tropecientos kilómetros en una semana –
Pero, por desgracia, hay algunos que se me resisten:
⇾ Los viajes por MAR 🌊
Siempre, siempre, siempre, acabo así ⇾ dando de comer a los peces 🤮
—Pero, ¿y si pruebas en un crucero gigantesco, lancha a motor, balsa miniatura, catamarán, velero, o un barco por el Nilo?⛵🚤🛥⛴🛳🚢
Los he probado todos y nada 🙄.
Está claro que no, No soy el #clienteideal de los viajes por mar.
Es así, y lo peor es que no soy la única.
Por eso es importante que realices el ejercicio contrario al que siempre haces⇾ quién NO es tu cliente ideal. Haciéndolo, podrás definir mejor a quien NO quieres atraer. Sobre todo, cuando se trata de ciertos servicios turísticos.
En algunos casos, incluso recomiendo añadir esta sección a la web:
“Este servicio NO es para ti si…”
—¿Pero cómo voy a poner eso?, entonces pierdo clientes – puede que estés pensando —.
Mi respuesta es: no, no pierdes clientes, los filtras y te ahorras tener que aguantar a un cliente con cara de pescado hervido, como yo 🤢.
Filtrar clientes no es perderlos, es ganarlos en calidad.
🤔 ¿Has hecho alguna vez este ejercicio?
0 comentarios